Existe la creencia de que las lesbianas son menos susceptibles a la infección por Virus del Papiloma Humano (VPH) y tienen menos necesidad de realizarse exámenes de detección, esto bajo la desinformación respecto a que las mujeres que nunca han tenido relaciones sexuales con hombres tienen un riesgo muy bajo de desarrollar cáncer cervicouterino, causado por el VPH.
El VPH en realidad no solo es un virus, es una familia de más de 150 tipos de virus que afectan la piel y las mucosas produciendo verrugas genitales e incluso cáncer. De esos 150 tipos, entre 30 y 40 se transmiten por contacto sexual. De hecho, es altamente probable que al menos una vez en tu vida ya te hayas topado con este virus. De acuerdo con el Instituto Nacional de las Mujeres, cerca del 80% de la población mexicana está o ha estado infectada con el virus.
Los factores de riesgo de cáncer cervicouterino en las mujeres lesbianas no son diferentes a los de las mujeres heterosexuales, con la excepción de que el menor empleo de exámenes de detección entre las lesbianas las coloca en mayor riesgo de diagnóstico tardío. El virus del papiloma humano se puede transmitir sexualmente entre mujeres y no está claro si la prevalencia del cáncer cervicouterino es diferente en lesbianas en comparación con mujeres heterosexuales, ya que hay poca investigación al respecto, además de que los servicios rutinarios de detección están dirigidos mayoritariamente a mujeres heterosexuales y en el contexto de reproducción y control prenatal.
Es necesario trabajar para garantizar que se comunique un mensaje claro y coherente a las lesbianas y a los profesionales de la salud que realizan exámenes de detección, esto incluye el abordaje durante la consulta para evaluar adecuadamente los antecedentes y prácticas sexuales de todas las pacientes con un abordaje respetuoso e incluyente.